12/13/2010
Gobiernos, ¿fracasados?
Arturo Damm

En más de una ocasión he afirmado que los gobiernos, de izquierda, centro o derecha, elegidos por una mayoría de electores o impuestos por la fuerza de unos cuantos, son los grandes fracasados de la historia contemporánea, fracaso que se muestra, sobre todo, en el campo de la economía. A las pruebas me remito.

Al inicio de la recesión, entre marzo de 2008 y enero de 2009, el gobierno mexicano puso en marcha varios programas con la intención de enfrentar las presiones recesivas que empezaban a golpear a la economía mexicana desde los Estados Unidos, y a hacerlo por medio del comercio exterior, la inversión extranjera directa y el envío de remesas. En marzo de 2008 se puso en marcha el Programa de Apoyo a la Economía, en octubre de aquel mismo año se lanzó el Programa para Impulsar el Crecimiento y el Empleo y, en enero de 2009, inició la aplicación del Acuerdo Nacional a favor de la Economía Familiar y el Empleo. Esos programas, ¿tuvieron éxito? Veámoslo.

En 2007, antes de la recesión, la producción de bienes y servicios en México registró un crecimiento de 3.3 por ciento, que en 2008, año del inicio de la recesión, cayó a 1.3, y que en 2009, año de la recesión, resultó de menos 6.6 por ciento, la mayor contracción de la producción de mercancías desde los tiempos de la Gran Depresión, misma que tuvo lugar al final de la década de los veinte, y principio de los años treinta, del siglo pasado.

El Programa de Apoyo a la Economía contemplaba diez medidas “para impulsar la actividad económica, la inversión y el empleo”. El Programa para Impulsar el Crecimiento y el Empleo constaba de cinco medidas “para impulsar el crecimiento y el empleo”. El Acuerdo Nacional a favor de la Economía Familiar y el Empleo estaba integrado por veinticinco acciones para apoyar a los trabajadores y al empleo, a la economía familiar, a la competitividad, a las pequeñas y medianas empresas, a la inversión en infraestructura, al gasto gubernamental transparente y, en general, al crecimiento de la economía.

Al final de cuentas, ¿qué pasó? Que en 2008 la economía registró un pobre crecimiento de 1. 3 por ciento y, en 2009, una considerable contracción de 6.6 puntos porcentuales, sin olvidar que, en 2009, con relación a 2008, se perdieron, en el sector formal de la economía, 441 mil 449 puestos de trabajo. ¿Qué tanto éxito tuvieron los programas que aplicó el gobierno para combatir la recesión? Los programas económicos, ¿son los únicos programas gubernamentales que fracasan? ¿Qué tanto éxito tiene el gobierno en la realización de la única tarea a la que no puede renunciar sin dejar de ser gobierno: garantizar la seguridad contra la delincuencia y, de fracasar, impartir justicia? ¿Tengo o no tengo razón al afirmar que los gobiernos (así, en plural, porque en estos menesteres el mexicano no tiene la exclusiva), son los grandes fracasados y los gobernados, comenzando por los contribuyentes, los grandes engañados? ¿Sí o no?



«Regresar a la página de inicio