Asuntos Capitales
Los dineros del PRD
“Los perredistas acusan a los candidatos de los demás partidos de haber usado recursos públicos, cuando el desvío hacia su partido es conocido por todos lo habitantes del D.F.”
Luis Pazos
VIERNES, 8 DE SEPTIEMBRE DE 2006
El PRD fue
el partido que organizó más eventos masivos, el que tuvo la campaña más larga y
el que transmitió un mayor número de anuncios en televisión, que son los más
caros. Hay varias presuntas fuentes ilegales de financiamiento en la campaña
del PRD, que le permitieron sumar millones de votos a su candidato. Una de
ellas fue el uso electoral de los programas sociales durante los seis años del
gobierno perredista. Las llamadas
“redes ciudadanas” repartieron con un criterio electoral casi todos los
beneficios de los programas de ayuda a Otras de las
presuntas fuentes de recursos fue el “diezmo” de los contratistas de obras en
el D.F. Más allá de la tesis del “complot”, la
difusión de los “videoescándalos” mostró a
importantes funcionarios de las delegaciones perredistas
del D.F. y a operadores del ex candidato perredista, recibiendo dinero de un contratista para las
campañas. Calcule el 10 ó 15% de la mayoría de las obras en el D.F en seis años y tendrá una probable multimillonaria
fuente de financiamiento de la campaña pederrista. Durante los
gobiernos perredistas los comerciantes callejeros
aumentaron siete veces, de menos de 100 mil a más de 700 mil, la mayoría
afiliados a organizaciones perredistas. Una sola
cuadra de vendedores callejeros representa millones de pesos mensuales, parte
de los cuales han ido a parar a la campaña del candidato perredista.
Súmele también las cuotas sin recibo de miles de taxistas piratas. Los perredistas acusan a los candidatos de los demás partidos
de haber usado recursos públicos, cuando el desvío hacia su partido es conocido
por todos lo habitantes del D.F. Durante seis años el
gobierno perredista dedicó la mayor parte de su
tiempo a apoyar la campaña de su candidato a presidente, dejando en un segundo
lugar sus funciones propias, como el garantizar la seguridad de los ciudadanos. |