Asuntos Capitales

¿Quién tramó la matanza del 68?

“Fueron radicales de izquierda quienes tramaron esa matanza, con la conocida estrategia de crear víctimas, para alargar la vida de un movimiento que agonizaba.”


Luis Pazos
VIERNES, 20 DE JULIO DE 2007

A 39 años, no hay pruebas contundentes de quienes dispararon a una multitud desde los edificios colindantes a la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco. Hay quienes culpan al Presidente de la República y al Secretario de Gobernación en turno; otros, al ejército o a grupos políticos que buscaban evitar la candidatura presidencial del Secretario de Gobernación. Sería pretencioso afirmar que tengo la versión definitiva de lo sucedido en el 68, pero sí una hipótesis que parte de hechos comprobados.

 

El llamado Comité Nacional de Huelga estaba formado en su mayoría por estudiantes y seudo estudiantes, que profesaban la ideología marxista leninista. Justificaban la violencia como medio para llegar al poder. El movimiento en octubre del 68 se encontraba debilitado, ya no tenía fuerza para lograr la suspensión de las Olimpiadas, a iniciarse a unas semanas de la matanza. A los líderes les convenía un evento que colocara en los medios internacionales su insurrección y levantara indignación contra el gobierno.

 

Un amigo, miembro de un grupo trotskista, me advirtió que no fuera a ese mitin, pues iba a suceder algo “grueso”, pero no sabía qué. El gobierno también tenía esa información, pero tampoco sabía exactamente lo que sucedería. Por ello mandó un batallón de paracaidistas. Hablaron varios líderes en el mitin y se retiraron discretamente. El oficial al mando de los soldados, general José Hernández Toledo, mandó un parte de “sin novedad” y con un megáfono invitó a los asistentes a disolverse. A los pocos minutos de haberse ido los oradores, de la azotea de uno de los edificios empezaron a disparar con ametralladoras contra los estudiantes y soldados que todavía estaban en la plaza. De los primeros en caer heridos, por varios disparos, fue el general Hernández Toledo. Murieron estudiantes y soldados.

 

En ese tiempo yo era presidente de la Sociedad de Alumnos de la Escuela Libre de Derecho. Unos compañeros me pidieron que cerráramos la escuela en protesta por la matanza de estudiantes. Les dije que sí, si me decían de algún líder muerto. No pudieron, porque ninguno murió. Ya sabían lo que venía y se fueron antes de los disparos.

 

¿A quienes les convenía esa matanza? ¿Al gobierno en turno o a los líderes radicales que controlaban el movimiento? Mi hipótesis, más lógica que otras, es que fueron radicales de izquierda quienes tramaron esa matanza, con la conocida estrategia de crear víctimas, para alargar la vida de un movimiento que agonizaba.