Asuntos Capitales

Las fuerzas armadas mexicanas ¿entre las mejores?

“No son perfectas nuestras fuerzas armadas y estoy seguro que pueden hacer todavía más, pero por su actuación en los desastres naturales y en la vida política, las considero entre las mejores del mundo.”


Luis Pazos
MIÉRCOLES, 30 DE NOVIEMBRE DE 2005

Los parámetros para juzgar la eficacia de las fuerzas armadas de un país han variado. Hay quienes todavía piensan que la mejor armada de un país es la que tiene el mayor poder destructivo o la mayor posibilidad de repeler un ataque de un enemigo externo.  Esas son algunas de las características de unas fuerzas armadas en una sociedad actual, pero no son las únicas ni las principales.               

 

El concepto de seguridad nacional se ha modificado a través de la historia, ya no implica sólo una guerra con otro país, sino enfrentar problemas internos que tienen que ver con la estabilidad, el orden y la sustentabilidad de la paz social. En el caso de México, tanto el Ejército como la Marina, han demostrado en caso de desastres naturales, que han cumplido con su deber, quizá con mayor prontitud y entrega que muchos ejércitos de países desarrollados, donde son mayores los presupuestos y los recursos materiales.

 

A pesar de México tener uno de los menores gastos en las fuerzas armadas en relación al presupuesto total, éstas han demostrado su entrega y entusiasmo en la ayuda a los damnificados de terremotos y huracanes, sin descuidar el combate al narcotráfico, renglón del cual no se ocupan muchos ejércitos en países desarrollados.

 

El Ejército y la Marina mexicana han demostrado su institucionalidad y seriedad ante eventos políticos trascendentales en la vida nacional. Muchos olvidan que en pocos países del mundo ha habido una entrega pacífica del poder político por parte de las fuerzas armadas, como pasó en México en la década de los 40. El General Manuel Ávila Camacho, conocido como el presidente “caballero” por su cordialidad en el trato, entregó el gobierno a los civiles en un acto de profesionalismo de las fuerzas armadas.

 

El Ejército y la Marina mexicana mostraron también su institucionalidad cuando llegó al poder en el año 2000 un partido diferente al que había gobernado durante 70 años. Las fuerzas armadas aceptaron el cambio como en las democracias más adelantadas. No son perfectas nuestras fuerzas armadas y estoy seguro que pueden hacer todavía más, pero por su actuación en los desastres naturales y en la vida política, las considero entre las mejores del mundo.