Asuntos Capitales

Izquierda conservadora y desastre petrolero

“Si no hay la posibilidad de que PEMEX se asocie con otras empresas, en pocos años nos convertiremos en importadores netos de petróleo. Pero parece que a la izquierda conservadora no le importa eso si gracias a ello conservan banderas políticas para engatusar a ignorantes a costa del monopolio estatal petrolero mexicano, único en su género en todo el mundo.”


Luis Pazos
MIÉRCOLES, 26 DE MARZO DE 2008

Durante el siglo XIX se le llamó conservadores a quienes se oponían a todo cambio, es decir, los que querían que las cosas siguieran como estaban. Sus contrarios eran los llamados liberales, que pregonaban cambios y libertades, aunque en ocasiones no actuaron como verdaderos liberales.

 

En el siglo XX surgen otros grupos que se denominaron revolucionarios, pero pocos de ellos hicieron honor al nombre de revolucionar, que significa hacer las cosas mejor que antes. Donde llegaron al poder, la situación social quedó peor que antes de que llegaran. 

 

En México, la izquierda, que se dice revolucionaria, ha pasado a ocupar el banquillo de los conservadores del siglo XIX, pues se oponen a todo cambio que intente una mayor productividad y modernización a las estructuras del país, como la Reforma Petrolera, la Reforma Laboral y el Libre Comercio.

 

En el caso del sector petrolero la situación de los conservadores de izquierda es irracional y caprichosa. Pretenden conservar el monopolio estatal absoluto en el sector petrolero, que ha generado, como ellos mismos lo admiten, corrupción, baja de las reservas, aumento en las importaciones de gasolinas y el colocar a PEMEX como una de las empresas petroleras más improductivas del mundo.

 

En el sexenio pasado el Presidente Fox trató de introducir mejoras, como las de incorporar al Consejo de Administración a dos empresarios ajenos al sindicato y a la burocracia; la izquierda y los sindicatos echaron abajo ese avance. Lo calificaron como un atentado contra la soberanía del país.

 

Si no hay la posibilidad de que PEMEX se asocie con otras empresas para extraer hidrocarburos en el Golfo de México, en pocos años nos convertiremos en importadores netos de petróleo. Pero parece que a esa izquierda conservadora no le importa que se acabe la riqueza petrolera, que nos convirtamos en importadores de petróleo, si gracias a ello conservan banderas políticas para engatusar a ignorantes a costa del monopolio estatal petrolero mexicano, único en su género en todo el mundo.