Asuntos Capitales

Una señora muy fina...

“No, no era una vieja ricachona de Las Lomas de Chapultepec (¿O sí­?), sino una esforzada "luchadora social" recordándole a un policí­a que gana 20 veces menos que ella, pues eso: Que todavía hay clases. Bien, doña Clara Brugada, se ve que no fueron en vano tantos años gastados en su educación (la señora presume ser licenciada en Economía de la UAM Iztapalapa.”


Clotilde Hinojosa de Reynaud
, DE DE
Luego, luego se nota la clase. El otro día vi en un noticiario de televisión a una de esas señoras prepotentes que suelen hablarles con majaderías a empleados y subordinados... Ustedes saben, una señora típica "nueva rica". La señora, pasadita de kilos y con el pelo pintado de anaranjado cortocircuito, le gritaba a un pobre policía que le impedía el paso: "Soy diputada, hijo de la chingada", al tiempo que lo empujaba y manoteaba. No, no era una vieja ricachona de Las Lomas de Chapultepec (¿O sí­?), sino una esforzada "luchadora social" recordándole a un policí­a que gana 20 veces menos que ella, pues eso: Que todavía hay clases. Bien, doña Clara Brugada, se ve que no fueron en vano tantos años gastados en su educación (la señora presume ser licenciada en Economía de la UAM Iztapalapa... pagada con nuestros impuestos), se ve que usted tiene una clara conciencia social y sabe poner en su lugar a esa bola de nacos que sólo cumplen con su deber. Primero los pobres, pero primero que los pobres, los defensores de los pobres, como doña Clara Brugada, futura senadora suplente de ese encanto de caballero -no podía ser de otra manera- que se llama Pablo Gómez.