La mejor forma de ayudar a los trabajadores no es aumentando salarios mínimos en dos dígitos, como en la época de los 70 y 80, sino reduciendo la inflación y generando un ambiente de competitividad y estabilidad.
A finales de
diciembre
En los años
70 y 80, aumentos del 10, 20 y hasta 30% fue el principal ingrediente del
espejismo de los altos salarios. Esos incrementos sólo atizaron el fuego inflacionario.
En tiempos de Echeverría, López Portillo
y Miguel de
En la época
en que más crecieron los salarios reales fue en los años 50 y 60, con Ruiz
Cortines, López Mateos y Díaz Ordaz. En ese entonces los salarios mínimos se
movían cada dos años, con aumentos iguales o menores a los recientemente
anunciados.
En los
primeros cinco años de López Portillo,
caracterizados por constantes aumentos salariales, el salario real de
los trabajadores se redujo en 21.3%; con Miguel de
Más allá de
cifras o descalificaciones por motivos ideológicos o electorales, la mejor
forma de ayudar a los trabajadores no es aumentando salarios mínimos en dos
dígitos, como en la época de los 70 y 80, sino reduciendo la inflación y
generando un ambiente de competitividad y estabilidad, que mantenga su poder
adquisitivo real de los trabajadores, fomente la creación de empleos e
incremente la productividad, único camino para mejorar los salarios en forma
real y permanente.
EntrarLa gente subestima la facilidad con la que los gobiernos pueden destruir una economía y lo difícil que es reiniciar esas economías.