Si hay algo que deberíamos aprender del Estado de Colombia es la efectividad de su Ejército. Desde la batalla de Boyacá hasta hoy este ejército cuida de la República que él mismo construyó. De hecho el día 2 de julio de 2008 será un grande día en la historia de Colombia y uno de los “peores” para las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas. La operación “jaque-mate” para Álvaro Uribe fue todo un éxito.

En esta operación –como no ha habido otra– el servicio de inteligencia de las Fuerzas Armadas burló a los comandantes de las FARC en una acción típica de las películas de espionaje. El equipo de esta operación lo conformaban cuatro militares que hacían las veces de pilotos y tripulación del helicóptero, nueve del equipo de rescate en la selva y aproximadamente dieciocho en tierra coordinando la operación y monitoreando para que todo saliera dentro de lo previsto.

El canal CNN en español hizo una cobertura completa mencionando el mensaje enviado por Evo Morales que como era de esperar enaltecía el papel de Chávez y Correa en el episodio, pero Daniel Viotto que hizo la cobertura, después de leer la nota de Evo Morales corrigió al cocalero diciendo que realmente la victoria era únicamente del gobierno de Uribe y de las Fuerzas Militares de Colombia. La políticamente correcta Televisa, a través del señor López Dóriga, se unía a la “radio suiza romande” (estatal) y a otras tantas que divulgaron un supuesto fraude en ese operativo. La radio afirmaba que Uribe había pagado 20 millones de dólares –donados por los EU– para la liberación de los prisioneros.

Aquí puede ver una alocución detallada del Comandante de las Fuerzas Militares, Freddy Padilla de León, hecha durante el encuentro en el Club Militar. Aquí también puede verse el momento en que los prisioneros caminan para el helicóptero y “César” es desarmado; es el momento donde es comunicada su libertad. Para desmentir al señor López Dóriga muestro aquí a Ingrid en los primeros momentos de contacto con la nueva situación. Y en este otro toda la operación del rescate.

Todo esto puede llevarnos a concluir que después de la muerte de Raúl Reyes, de Tirofijo y ahora de este exitoso operativo la vida de las FARC está llegando a su fin. Triste mentira. Lo que buscan las FARC ahora es dejar así la vía armada para volverse un partido que llegue al poder como lo ha hecho la mayoría que ahora gobierna en América Latina. Basta saber qué han dicho los integrantes del Foro de San Pablo y algunos seguidores de las FARC en estos días.

Piedad Córdoba dijo sentirse muy contenta, pero –resaltó– que eso serviría para avanzar en un proceso de acuerdo humanitario. Daniel Ortega en un comunicado a través de su Canciller, Samuel Santos, dijo: “Nosotros estamos contentos de que se vayan resolviendo poco a poco los problemas, pero la verdadera solución solamente se verá en el diálogo y negociación”. Lula, Chávez y el mismo Fidel siguieron las mismas coordenadas al decir que “no hay más espacio para alcanzar el poder a través de las armas o fusibles”, por eso es necesario organizar un comité de negociaciones entre los países de la región para alcanzar la paz. Lula dijo que “las FARC deben acabar. Aquí en América del Sur y en América Latina no hay ninguna razón para llegar al poder por la vía armada, porque la democracia reina en este continente”.

El presidente Sarkozy se alegró con la liberación de Ingrid Betancourt –aunque fue visible su descontento– y agradeció a Chávez, Correa y Córdoba por sus intervenciones, al final se percató de no haber pronunciado el nombre del presidente Álvaro Uribe y entonces agradeció al Presidente por el operativo “jaque-mate”. Al contrario de lo antes dicho, Ingrid Betancourt todavía en el aeropuerto militar elogió el grandioso trabajo de los militares, del Presidente Uribe y de su administración, diciendo que ella no habría sido tan buena cuanto él.

Como ha observado el filósofo Olavo de Carvalho: “Todos los clásicos de la guerra revolucionaria explican que las guerrillas no tienen por blanco derrotar al adversario en el campo de batalla, mas forzarlo a aceptar sus exigencias políticas. Ese es el único objetivo al que pueden aspirar y la única razón de ser de su existencia –y para eso, la derrota militar puede ser todavía mejor que la victoria”.

No tengo ninguna duda de que los que apoyan a las FARC están utilizando las mismas técnicas que los llevaron al poder, pasaron de la lucha armada a la vía democrática y para eso es necesario implorar de todas las formas posibles (radio, televisión, opinión pública) la continuidad a los “acuerdos humanitarios” y la misma democracia para que sean –las FARC– agregadas al proceso político como un partido legalizado. No se quiere terminar con ellas y sí darles derechos como a los otros partidos.

Pero para una organización que mató casi treinta mil personas y mantuvo cerca de tres mil secuestrados en condiciones sub-humanas en aproximadamente una década infestando a muchos países de estupefacientes, darle el derecho de admisión como partido político siendo perdonada de todos sus crímenes es darle una victoria perfecta, es darnos un tiro en el propio pie.

Creo que lo que está por venir es el apoyo incondicional de los 13 presidentes miembros del Foro de San Pablo así como de los medios de comunicación criticando al Presidente Álvaro Uribe y sus políticas, pasando por los Estados Unidos y dándole todo el apoyo a Alfonso Cano y sus compinches.

Post. Scriptum:

El último encuentro del Foro de San Pablo realizado en Uruguay, mejor, en la Sede del MERCOSUR, manifestó su apoyo al Presidente Correa y al desprestigio del Presidente Álvaro Uribe y su lucha contra el terrorismo. ¿Por qué será?